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La crónica del reencuentro

24 de Octubre de 2016

El Textil Escudo venció 3-0 al SD Revilla en el partido de la undécima jornada liguera en Tercera División, logrando con claridad y determinación una victoria que se le resistía desde hacía dos meses.

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Crónica de ÓSCAR ARCONES Foto de RICARDO Desde que Butra marcara en el minuto 94 del debut liguero ante el Escobedo un gol que significaba tres puntos hasta que se ha ganado al Revilla, han pasado diez jornadas o, lo que es lo mismo, 63 días. Alguien dirá que eso no es nada y que hablar de reencuentro es ridículo, pero en este tiempo han sucedido tantas cosas... Muchas vivencias para un grupo joven que ha podido acusar en algún momento su inmadurez, pero que ha salido adelante y que ha demostrado a base de orgullo, casta y confianza en sí mismos que tienen mucho que decir. Esta última frase bien podría valer igual para Operación Triunfo - El Reencuentro 15 años después, que para el Textil Escudo 2016-17, solo que en el Juan Mª Parés Serra por ahora se cantan goles...y gracias, que el sol tiene que seguir brillando para que la península mire con envidia a Cantabria. Tres tantos se cantaron, y con mucha fuerza por lo que significaron para Pablo Cano, Héctor Marcos y Pablo Iglesias, goleadores que ponen nombre y apellidos a la liberación de un colectivo que disfrutó con lo vivido. Había nervios, y ganas de fútbol en una tarde plácida que el viento no se quería perder, pero no hemos llegado hasta aquí para que el aire nos asuste, se debieron decir los jugadores del Textil Escudo, que saltaron al césped concienciados de que ya tocaba ganar. Perujo con un córner muy cerrado que despejó Jandro a la otra esquina y Héctor Marcos con un cabezazo en los primeros minutos ya mostraron las credenciales de un Textil Escudo que buscaba el partido. Alberto intervenía con acierto tras jugada ensayada y el partido se daba una pequeña tregua, hasta que mediado el primer periodo, el medio campo local empezó a combinar con los delanteros, con un fútbol más vertical que se traducía en llegadas. Pulgada a pulgada, como le gusta al nuevo míster, el Textil Escudo ponía cerco a la meta local, y aunque Pablo Iglesias no empujaba por milímetros el balón de Héctor, minutos después llegaba el gol por medio de Pablo Cano, que empujaba al fondo de las mallas un balón suelto tras rechace del meta del Revilla a disparo abajo del mismo Héctor después de un gran pase que filtró Perujo. Gol balsámico el de Cano, porque calmó los nervios de todos e incrementó de manera notable la fe en si mismos de unos jugadores que llevaban demasiado tiempo padeciendo penalidades e infortunios. Pero esa tarde veraniega de finales de octubre, nada podía salir mal y si al descanso se llegó con mínima ventaja, la vuelta de vestuarios significó la más esperada, y necesaria, de las reconciliaciones, la de un nueve, la de El 9, con el gol En el minuto 3 llegó. "Pasaba por aquí", dijo Héctor despreocupado, como disimulando, tras recibir un envío de Bruno en la frontal del área, algo escorado, una frase que despertó una media sonrisa de incredulidad entre los espectadores, como cuando un niño niega haberse comido esa gominola que estaba sobre la mesa. Porque como buen delantero, Héctor lleva once jornadas detrás de ello y de forma casi obsesiva ha buscado ese gol que le haga sentirse importante y todos lo sabíamos, así que cuando el balón llegó a sus botas, todos le impulsamos y creímos con esa fe que solo se puede tener en alguien que siempre ha respondido, que el gol iba a llegar. Y llegó,y todos, los de antes, los de ahora, los de siempre, los recién llegados, todos gritamos y nos fundimos con él en un abrazo, real o imaginado. Su gol había llegado y era además el de la tranquilidad porque acabó con las esperanzas de remontada del Revilla, que ya perdió toda la fe cuando ocho minutos después Iglesias, de nombre Pablo y de profesión goleador, también, aprovechó un balón suelto en el área tras peinar un córner Adri. 3-0 y media hora por delante, tiempo para que Alberto creciera en confianza con su portería a cero, para que debutara Tito con su nuevo equipo, para que el partido se alargara sin complicaciones, para que el fútbol y su continuo vaivén le diera una tregua más que merecida al Textil Escudo, para que 63 días después, el 1 en la quiniela volviera a alegrar al Juan Mª Parés Serra. Queda mucha liga, mucho por vivir y sufrir, pero ya nos tocaba ganar. TEXTIL ESCUDO: Alberto, Adrián Mier, Dosal (Izan, min.80), Adrián Díaz, Aitor, Guillermo, Pablo Cano, Bruno, Perujo, Pablo Iglesias (Borja, min.62) y Héctor Marcos (Tito, min.71). SD REVILLA: Jandro, Pablo, David, Igor, Juan Luis, Jorge (Kevin, min.53), Piney, Manuel, Luis (Fran, min.27), Rubén y Pedro (Dani, min.63) GOLES: 1-0 Pablo Cano (min.30); 2-0 Héctor Marcos (min.48); 3-0 Pablo Iglesias (min. 56) ÁRBITRO: Antonio Moroso Medialdea, amonestó a Guillermo, Dosal, Tito y Aitor del Textil Escudo y a Jorge, Pedro y Dani del Revilla.




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