Cuestión de milímetros
06 de Febrero de 2017
Un gol en el primer minuto de juego fue suficiente para que el Castro FC derrotara 1-0 al Textil Escudo, en un partido marcado por las dificultades climatológicas y en el que los cabezonenses dispusieron de oportunidades claras para lograr algo positivo
En Castro Urdiales había lluvia intemitente, en ocasiones con mucha fuerza, granizo, viento arreciando, frío....No, no estás en la web de AEMET leyendo el parte meteorológico, estás leyendo la crónica del Castro-Textil Escudo, en el que para referirse al partido hay que empezar hablando de las condiciones en que se desarrolló el mismo, y que de manera indudable marcaron el devenir del choque. Ya en el calentamiento costaba circular el balón sobre el césped de Riomar, que acabó por dificultar hasta mantenerse en equilibrio en el tramo final de partido, condicionantes que perjudicaron al Textil Escudo, que se acopló peor a las condiciones del campo que su rival, un Castro que supo aprovechar la primera oportunidad, cuando Borja se encontró con un balón en la frontal y con la zurda disparó fuerte abajo y adelantó a su equipo, cuando apenas habían discurrido segundos desde el pitido inicial. Con ese jarro de agua fría, el partido se complicó mucho para el equipo cabezonense, que vio cómo gracias a un juego directo aprovechando las segundas jugadas, el Castro sabía adueñarse del partido, aprovechando también el viento a favor que dificultaba los intentos visitantes de sacudirse el dominio. Pero el fútbol también es cuestión de adaptación, de saber aclimatarse a las condiciones y poco a poco el Textil Escudo fue comenzando a acercarse a la portería de Gorka, con los hombres de ataque Perujo, Héctor y Raúl empezando a encontrar el camino de la meta rival. Un tiro de Adrián a la salida de un córner que se marchó fuera fue otra oportunidad que sirvió al Textil Escudo para demostrarse a sí mismo que, aunque la cosa no estuviera para disfrutar, el partido sí que podía ser propicio para al menos puntuar. En la segunda mitad, el Textil Escudo tenía además el viento a favor, lo que podría ayudarle y así llegaron las oportunidades más claras. Bruno disparó arriba desde la frontal en los primeros minutos, poniéndose el partido más de cara cuando en seis minutos, Javi vio dos cartulinas amarillas en un partido de guante blanco y dejó en el 57 a su equipo con diez. Ingredientes todos que ponían más cerca el empate, pero el Castro fue capaz de sacrificarse y ordenarse bien, dificultando los acercamientos del Textil Escudo. En el ecuador de la segunda mitad es cuando se sucedieron las oportunidades para el Textil Escudo, que tuvo diez minutos en los que asedió con toda la confianza la portería de Gorka, que aprovechó su momento para amargar la tarde a los atacantes locales. Primero a Héctor, con una gran estirada tras disparo desde la frontal y con otra parada a cabezazo del nueve del Escudo en el córner posterior. Tras esta doble ocasión, llegó una más por medio de Raúl, que no esperaba el único fallo del meta local en un balón que no atajó, pero cuando le cayó el balón en el corazón del área, su remate se marchó fuera. Y después, la oportunidad que da título a esta crónica, porque a milímetros se quedó el disparo de Cano de superar la línea de gol, pero el fútbol es caprichoso, y el barro también, y ese tiro raso del centrocampista cabezonense se quedó clavado sobre la línea de gol cuando ya se cantaba el tanto del empate. Un defensor bajo palos sacó el balón y por si fuera poco, la decepción se colmó un minuto después, con un tiro del propio Cano que despejó Gorka. Aún quedaba tiempo y el Textil Escudo apostó por el partido con más riesgos en defensa y un hombre más, pero sin embargo esos milímetros que faltaron para el empate parecieron una losa insalvable para la mentalidad del equipo. Siguió intentándolo el Textil Escudo en el último cuarto de hora de partido, pero el cansancio pesó en el equipo y la ofensiva ya resultó menos ordenada y convincente, perdiéndose el partido entre parones, alguna protesta y el fútbol, que no dio la oportunidad al Textil Escudo de sacar algo del campo de Riomar, que sigue siendo un campo en el que sacar algo positivo es una misión imposible. Pero eso que faltó el domingo en Castro, otro día sobrará, y en la línea de confianza que muestra la plantilla en la segunda vuelta, es obligatorio ser optimista, por milímetros.... y por coj.... ¡Aúpa Escudo! Por Óscar Arcones Foto: Un lance del partido capturado de forma magistral por @muroderichi
