Volver a empezar

16 de Julio de 2018

El Textil Escudo se puso en marcha en una tarde-noche apacible completando el primer entrenamiento de una larga temporada que se espera tan feliz como las de estos últimos años.

Texto y foto de Óscar Arcones

Como en un primer día de clase, el Textil Escudo vivió una jornada de presentaciones, de reencuentros, de vuelta al trabajo y de buen ambiente, con alguna ausencia justificada y con un clima de ilusión ante una nueva campaña en la que el equipo tratará de dar continuidad a los buenos resultados y mejores sensaciones de la temporada 2017-18.

A lo largo de la tarde se fueron instalando los futbolistas en el vestuario, buscando su lugar en el mismo los nuevos, que iban presentándose a los que desde ya son sus compañeros en la pelea conjunta por formar un equipo de garantías que cumpla con los objetivos ambiciosos que el grupo tiene que marcarse, con ganas de hacerlo bien en la Copa RFEF como anfitriones el próximo mes de agosto, en el mismo escenario donde no tardaron en dar las primeras carreras.

Caras nuevas en la plantilla, con jóvenes deseosos de mostrar sus cualidades y veteranos que siguen formando la columna vertebral de un grupo en el que el trabajo en equipo es la máxima desde la que los resultados tienen que venir, consiguiendo conformar un bloque compacto y extremadamente competitivo para pelear de tú a tú con cualquier rival.

Pero no solo en la plantilla, sino que también habrá novedades en el cuerpo técnico, con la salida por motivos laborales de José Francisco Pozueta, con una labor intachable en las dos últimas temporadas y al que sin duda se echará de menos. En su lugar, Pablo Lobeto ha apostado por la juventud, con un segundo entrenador que aportará sus conocimientos en la preparación de los encuentros, Diego Menocal y un preparador físico aún más joven, Roberto Cabielles, que ya tomó el mando en los primeros ejercicios de la jornada para mostrarse concienzudo y exigente con sus pupilos.

Junto a ellos, continúan Agustín Pérez ayudando en todo lo que sea necesario y el incombustible José Ángel González, aunque el banquillo estará más poblado con la incorporación de Cristina González como fisioterapeuta, otra de las novedades en una temporada de crecimiento y consolidación del Textil Escudo entre los mejores equipos de la Tercera División.

El año será largo, pero la ilusión de cuerpo técnico y jugadores sigue siendo contagiosa, para directivos y algunos aficionados que no quisieron perderse esa puesta de largo, ese primer día de muchos días, con diez meses por delante para que el equipo vuelva a ser protagonista y motivo de orgullo para Cabezón de la Sal y sus gentes.

¡Aúpa Escudo¡ ¡Volvemos a la batalla!