El Textil Escudo 2019-20 sigue cogiendo forma y se siguen conociendo más nombres para que el proyecto siga su línea ascendente en la temporada próxima. Por ello es una buena noticia para el club seguir contando con futbolistas de talento y experiencia en la categoría como Andrei o Héctor y un joven que supo aprovechar sus oportunidades para asentarse en la categoría como es Marquitos.

El más veterano entre estos tres jóvenes es Héctor Alonso, que a sus 25 años ha decidido continuar en el Textil Escudo y afrontar su tercera temporada, segunda consecutiva, porque "me he sentido muy cómodo en mi regreso al equipo". Disfrutar de nuevo como jugador es algo que pretendía cuando confirmó su regreso el pasado año y una vez logrado, el de Puentenansa se va a exigir más de cara a la temporada que comienza "porque siempre se puede dar más y lo voy a intentar".

Para Héctor esta nueva temporada puede ser muy bonita "porque ya nos conocemos todos y con las incorporaciones seguro que el equipo mejora", así que el planteamiento del veloz atacante textil es "mejorar en lo posible lo del año pasado".

Avanzada la temporada recaló en el Textil Escudo Andrei Fronea, que supo salir airoso de un periodo de adaptación en un momento difícil para el equipo y dio muestras de su calidad con el paso de las jornadas. Para el jugador rumano de 24 años la clave para continuar es que "he estado muy a gusto en el grupo, los compañeros me acogieron muy bien y en la segunda vuelta se ha visto de lo que somos capaces".

En lo personal también es exigente consigo mismo y espera "aportar más cosas al equipo", al que ve con ganas de seguir deleitando a la afición de Cabezón de la Sal en la temporada "porque somos jóvenes, vamos a ir madurando y con la experiencia que vamos cogiendo seremos capaces de dar mucho más", expresa Andrei.

El más joven de los tres es Marcos Fernández, Marquitos, que a sus 20 años supo aprovechar sus oportunidades y con trabajo duro se supo ganar el puesto en la categoría para convertirse en un fijo del primer equipo. El defensa de Golbardo recaló para reforzar al filial y tras debutar en Polanco dio muestras de su capacidad para jugar en Tercera, disputando muchos partidos, algo que le resultó "un poco sorprendente, porque no esperaba jugar tanto y, aunque quería debutar, al final me asenté muy bien y me he visto mejorar mucho junto a mis compañeros".

Destaca por encima de todo "que en los peores momentos, cuando teníamos muy cerca el descenso, hemos ido todos a una, el equipo ha sabido funcionar y por eso se ha logrado el objetivo y hemos llegado a clasificarnos para la Copa RFEF". Ya como futbolista de Tercera para la 2019-20, Marquitos se fija para este año "objetivos mayores y nuevos retos, para los que seguro que estamos preparados".

Andrei, Marquitos y Héctor tuvieron protagonismo en la pasada campaña y para la que comienza trabajarán para ser aún más importantes, con ambición para llevar al Textil Escudo lo más arriba posible y seguir ayudando a que el equipo siga siendo uno de los destacados en el fútbol cántabro.