¡Qué manera de sufrir!
13 de Noviembre de 2016
El Textil Escudo salió del descenso y logró su primera victoria a domicilio en su visita al Colindres, al que venció por 2-3 en un partido que se le complicó al final tras mostrar su superioridad durante dos tercios del partido.
Por Óscar Arcones Lo cantó Sabina hace unos años, y decía que hablaba de un equipo rojiblanco, pero es lo que tienen los genios, que a veces crean y no se dan cuenta de que su obra tiene mayor alcance del nunca imaginado. Porque dice Wikipedia que Sabina es de Úbeda (Jaén), pero ignora que seguro tiene alguna vinculación con Cabezón de la Sal y ya va siendo hora de que alguien se lo diga…¡Joaquín, eres del Textil Escudo! Porque si ganas 0-3 en el minuto 69, con doblete de Perujo y gol de Héctor Marcos para demostrar que la mejor delantera de la categoría está en tu equipo, en el mío y en el de Sabina, entonces ya lo único que podías creer es en una victoria plácida y empezar a pensar en el domingo que se acaba, en los objetivos de la semana que entra o en la carta a los Reyes Magos, que ya están ahí. Pero amigo lector, eres del Textil Escudo, un equipo que al igual que te hace disfrutar, te hace sufrir, porque claro, es un equipo joven, y ya se sabe que la juventud en ocasiones tiene una tendencia incontrolable a complicarse la vida. En este caso, la liada llegó desde el punto fatídico, porque si tu rival evidencia que tiene dificultades para anotar, entonces le ofreces dos opciones en seis minutos desde el punto de penalti, que Tonio no desperdició, aunque en el segundo Alberto quiso demostrar que creyendo en hacer lo posible, a veces se consigue lo imposible, pero sólo a veces. Así que se pasó del 0-3 al 2-3 en un abrir y cerrar de ojos y entonces tila, sufrimiento y taquicardia se convirtieron en sinónimos de Textil Escudo, hasta que sonó el pitido final y la preocupación se transformó en una alegría de tres puntos. El Textil Escudo tuvo oportunidades en la primera parte, pero el último pase no era satisfactorio y el remate, cuando llegaba, siempre era forzado. La oportunidad más clara llegó para los de casa de la mano de Campos en un mano a mano que resolvió Alberto, además de un tanto del Colindres que se anuló por fuera de juego. Se acercaba el descanso sin que se moviera el marcador, hasta que la inspiración llegó al diez del Textil Escudo, ese del que algunos dudaron en alguna ocasión, pero… ¡Padre, perdónalos, porque no saben lo que dicen! Perujo recogió un balón, dribló, combinó con Raúl, que se la devolvió de primeras (y yo creo que ya sonriente y celebrando el gol que iba a llegar) porque entendió que algo bueno iba a pasar y entonces con la zurda hizo el 0-1 con que se pasó por vestuarios. Y a los cinco minutos de la reanudación recoge otro balón, amaga el pase, pero Perujo decidió por una vez en su vida ser algo egoísta y desde la frontal sorprender por bajo al portero anotando un 0-2 que dio tranquilidad a los visitantes. El Colindres se encontraba tocado, y más aún tras el tanto de Héctor Marcos en el que demostró su madera de goleador, recogiendo un balón en el área y llevándolo a la red en el 67. Todo el mundo miraba entonces esa clasificación virtual que dejaba al Textil Escudo fuera de posiciones de descenso con los tres puntos que parecían en el bolsillo, pero entonces llegó el momento de la inquietud, con penaltis, tensión, miedo…porque alguno dijo eso de que “sufriendo sabe mejor”, y claro, ese también debía ser del Textil Escudo. CD COLINDRES: Cagi, Iván, Raúl, Borja, Veci, Humada (Samu, min.58), Tonio, Chuky, Vichu (Cano, min.77), Víctor (Alain, min. 65) y Campos. TEXTIL ESCUDO: Alberto, Edgar, Dosal, Adrián Díaz, Aitor, Guillermo, Pablo Cano, Bruno (Bordas, min. 80), Raúl Rivero (Tito, min. 60), Perujo y Héctor Marcos (Adrián Mier, min. 87). GOLES: 0-1 Perujo (min.42); 0-2 Perujo (min.50); 0-3 Héctor Marcos (min. 67); 1-3 Tonio, de penalti (min. 70); 2-3 Tonio, de penalti (min. 76). ÁRBITRO: José María Zubillaga Serrano, amonestó a Cano, del Colindres y a Guillermo y Dosal, del Textil Escudo.
